Toma de Refugio

“Toma refugio sólo en ti mismo”
Buda Shakyamuni

En el inicio de las prácticas budistas encontramos la toma de refugio como una enseñanza fundamental.

La toma de refugio realmente significa conectar. Conectar es igual que estar en sintonía profunda con algo.

A través de la toma de refugio no solamente buscamos protección para nuestra alma, sino y sobre todo, recuperamos la conexión con la esencia.

El Budha es el refugio en la esencia de la mente, es la naturaleza primordial.

Dharma es la sabiduría, es la energía de la naturaleza en armonía, equilibrio y unidad. Son todas las enseñanzas y la realización.

Shanga es el conjunto de los bodhisattvas. Son todas las personas y seres que caminan en una misma dirección compasiva de liberación del sufrimiento.

La toma de refugio externo es una toma de refugio relativa, la cual ofrecerá la visión del Bhuda, el Dharma y la Sangha externos a nosotros.

Plegaria de Refugio Zen

Tomo refugio en el Buda

Tomo refugio en el Dharma

Tomo refugio en la Sangha

Plegaria de Refugio Tibetana

SANG GYE CHÖ TANG TSOk KYI CHOk NAM LA
En el Buda, el Dharma, y la Sangha

JANG CHUB PAR TU DAk NI KYAB SU CHI
hasta alcanzar la iluminación tomo refugio.

DAk GUI GUE JOR GYI PEY SÖ NAM KYI
Por el mérito de mis acciones positivas,

DrO LA PEN CHIR SANG GYE DrUB PAR SHOk
pueda yo alcanzar la budeidad para beneficiar a todos los seres.

El Refugio Interno

El refugio interno nos ayudará a encontrar al Bhuda en nuestro corazón. Es el refugio absoluto, donde la dualidad del refugio interno y externo se disuelven y nos encontramos a nosotros mismos con nuestra propia naturaleza budicas y nuestras cualidades despiertas.

La esencia de la práctica de la toma de refugio consiste en reconocer la esencia búdica en nosotros mismos.

Una de las prácticas de toma de Refugio más hermosas que he conocido es el Refugio Interno trasmitido por el maestro Tenzin Wgangyal Rimpoché.

Se trata de una práctica donde buscamos conectar con la esencia de nosotros mismos a través de los tres cuerpos, lo que nos ayudará a conectar y abrir las tres puertas de la liberación: vacío, conciencia y espaciosidad.

La enseñanza del Refugio Interno es sencilla pues a través de la propia conexión con el cuerpo, el silencio en nosotros mismos y el espacio interior, logramos tomar refugio en nuestro propio cuerpo del vacío, en nuestro cuerpo de luz y en la espaciosidad de la mente.

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