Allá en lo alto, descoloridas por el sol, ondean las plegarias de los antiguos para la bendición de toda la humanidad. Se dice que el mismo Shakyamuni Buddha pronunció las plegarias que fueron escritas sobre banderas de batalla que se utilizarían los mismos devas contra los asuras.
Los devas, las divinidades bondadosas invisibles para los humanos que han abierto el tercer ojo y tienen un poder extrasensorial. Son capaces de construir formas ilusorias y a través de ellas se comunican con humanos o devas inferiores. Los asuras son deidades que buscan el poder y constantemente están en guerra entre ellos. Son seres vanidosos, orgullosos, pasionales e iracundos. En el 800 d. C Padmasambhava introduce el budismo en Tibet por primera vez. En aquel tiempo la tradición Bön colgaba banderas con los cinco colores en representación de los cinco elementos y al unirse el chamanismo Bön con el budismo sobre estas banderas de colores se trascribieron las antiguas oraciones budistas. Existen dos tipos de banderas tibetanas: las Lung Ta y las Darcho.
Caballo de Viento Lung Ta
Lung Ta o Caballo de Viento es el nombre de las banderas tibetanas. A través de Lung Ta uno obtiene grandes beneficios y supera los obstáculos enla vida. Recupera la salud, la longevidad y aprende a aceptar su destino con fe. Sobre los lomos vemos que tiene una joya, es la joya de la sabiduría y la compasión. Se trata de la unión de las tres joyas: el Budha, el Dharma y la Sangha. Con esta joya Lung Ta se dirige hacia la verdad en beneficio de toda la humanidad, ayudándonos a desprendernos de una motivación egoísta. Por ello en las banderas tibetanas vemos reflejada la intención del Bodhisattva, las personas que buscan la iluminación por el bien de todos los seres. Con los pasos de Lung Ta recuperamos la confianza y la fuerza de voluntad.
La joya de la sabiduría es una bendición que nos ayuda a superar cualquier dificultad.
Viento, caballo y la joya de la sabiduría: el viento y el caballo reflejan movimiento, cambio, transformación, la joya es la voluntad y el tesoro que nos dirige hacia la autotransformación.
Los mantras
Las oraciones de las banderas son diferentes versiones de mantras tradicionales dirigidos a diferentes aspectos de lo divino representados por deidades diferentes. La oración más generalizada impresa en estas banderas es:
“Pueda cada ser viviente tener una vida sin temor, sin sufrimiento, sin desdicha, una vida con inteligencia, saludable, exitosa, bien orientada y con riqueza”
Todas las oraciones de las banderas son tomadas por el aire y dirigidas en todas las direcciones lo que nos ayuda a dirigir una oración a todos los seres.
Los cinco Elementos
En las bandetas están los cinco elementos representados por los cinco colores, lo que nos ayuda a equilibrar y proteger nuestra alma. A través de las experiencias de nuestra vida nuestros elementos en su base esencia pueden ser alterados, y a través de esta alteración podemos ver las diferentes dolencias y obstáculos en el camino. Cuando trabajamos con los cinco elementos buscamos recuperar el equilibrio en nosotros y en aquello que nos rodea, y es más, al trabajar los cinco elementos uno recupera una protección natural superior.
Los cinco colores representan las cinco familias de Buddha y los cinco elementos. Tienen un orden específico:
Azul ~ Espacio ~ Caballo de viento
Blanco ~ Agua ~ Dragón
Rojo ~ Fuego ~ Garuda
Verde ~ Aire y viento ~ Tigre
Amarillo ~Tierra ~ León
Los cuatro animales de poder
En cada esquina de las banderas encontramos los nombres de los cuatro animales de poder:
Garuda: Es un pájaro mítico considerado un semidios. Se trata de un águila gigante antropomórfica. Con cuerpo dorado, alas rojas y rostro blanco. Se dice que es tan grande que puede tapar la luz del Sol. Cuando Garuda nació los dioses vieron una luz tan brillante que se asustaron, y al descubrir que sólo era un bebé, lo alabaron como un ser superior y lo llamaron Fuego y Sol y se convirtió en el jefe de las aves y el enemigo de las serpientes. Se alimenta de serpientes por lo que representa la gran visión trascendental que corta de raíz el mal y rompe con todos los obstáculos del camino. Un ave protectora y de gran sabiduría que puede dar luz cuando uno necesita y también volar hasta las oscuridades más profundas.
Dragón: El dragón es el vehículo del Dhyani Buddha Vairochana, el Buddha de la Sabiduría última.
Se trata de Vajradhara o el último vehículo para el dharmakāya, el cuerpo de la iluminación. El dragón es un símbolo de la energía positiva creadora. El dragón está dotado de fuerza para el movimiento y la creación de las fuerzas esenciales de los elementos, a través de las cuales se forman todas las manifestaciones.
El dragón nutre y elimina todas las amenazas del cielo. Un cielo con un dragón es un cielo limpio, claro y transparente. Representa la superación de todas las amenazas de la mente. Una mente limpia es el camino hacia el dharmakāya.
Tigre: Se trata de una representación del Tigre Dawon, un sagrado animal que representa el guerrero rápido como una flecha. Su ferocidad desde su serenidad así como su gran concentración, nos señalan que tendrá éxito en cualquier tarea. En las banderas encontramos el tigre como un simbolo de éxito sin obstáculos en el camino.
Padmasambhava volvó por el Tibet en lomos de una tigresa. Aunque también se dice que la esposa de un emperador, Yeshe Tsogyal, se hizo discípula de Padmasambhava y se transformó en tigresa y llevó a Padmasambhava de Tibet a Butan.
León blanco de las nieves: Se trata de un animal celestial que representa la valentía y la alegría incondicional. Se trata del protector de Buddha. El mismo trono de Buddha es representado por ocho leones de las nieves. Su rugido es el sonido del vacío a través del cual encontramos la verdad. Nos entrega el coraje para cualquier desagío.
Cuando se dibuja el león blanco de las nieves se dibuja la ausencia de karma. El león blanco es una llamada al despertar. Aunque no vuele sus pies no tocan el suelo.