En la música encontramos los elementos de:
Ritmo: Vida fisiológica
Melodía: Vida afectiva
Armonía: Vida mental
A la hora de trabajar con cada uno de estos elemento debemos tener en cuenta sus características:
El Ritmo
Está presente en toda la estructura del universo. Todos los fenómenos, ya sean físicos, biológicos o psicosociales, se desarrollan en base al ritmo.
Para entender el ritmo hay que entender los movimientos de tensión-relajación, contracción-expansión o actividad-reposo.
El ritmo es el movimiento ordenado. Existe una conciencia rítmica o memoria rítmica en todas las cosas: en la naturaleza, las células, la vida, los átomos…
Ante la existencia de problemas de índole motora o física hay que desarrollar esta conciencia para reestructurar el espacio y/o el tiempo.
El ritmo actúa sobre la organización motora y los procesos de voluntad.
Trabajar con el ritmo tiene un efecto directo en el corazón, la circulación, la respiración y los ritmos u ondas cerebrales.
Por esto es un agente terapéutico en los problemas espacio temporales, la dislexia, la tartamudez o la motricidad entre otras.
Melodía
La melodía se relaciona con la afectividad. Actúa sobre la dimensión emocional y su acción terapéutica es muy reconocida ante problemas de índole afectivo. Según cómo se interprete la música, según su naturaleza, según los instrumentos, según la receptividad del que escucha, así se provocan diferentes efectos.
Tiene el poder de evocar, favorecer la visualización, provocar la aparición de recuerdos asociados a un determinado tema y de reacciones afectivas. Al igual que un organismo, nace, crece, culmina y se extingue. Actúa sobre cerebro medio (sistema límbico).
La melodía se usa en musicoterapia para evocar, visualizar, o suscitar reacciones afectivas. Se usa como agente terapéutico en problemas emocionales de duelo, depresión, contacto con uno mismo.
Armonía
Tiene un triple efecto porque engloba al ritmo y la melodía, abarcando los sensorial, lo afectivo y lo mental.Es la expresión de la belleza a través del mundo sonoro.
La armonía se relaciona con el consciente y el subconsciente, pues trabaja sobre lo interiorizado.
Actúa sobre la corteza cerebral, el cerebro pensante.Este elemento se puede trabajar con la voz, las palabras, el movimiento, el ambiente, la expresión en general, y representa la proporción en todas las cosas.
La armonía ayuda a despertar, desarrollar y estimular la imaginación, las facultades cognoscitivas, la estructura y el orden y el conocimiento y comprensión.