Se cuenta que Gurdjieff dejó una serie de consejos a su hija Dushka. Estos consejos han sido trasmitidos por muchos autores, aunque hay varias versiones, en general son 83 consejos claves para el desarrollo armónico humano.
Antes de leerlo debemos comprender que Gurdjieff antes de morir, quemó gran parte de sus escritos y libros. Creía que algunos discípulos malinterpretarían sus enseñanzas y las utilizarían con lecturas contradictorias. Intentó que siguieran vivas las enseñanzas orales y unos pocos escritos que consideró adecuados.
- Fija tu atención en ti misma; sé consciente en cada instante de lo que piensas, sientes, deseas y haces.
- Termina siempre lo que comenzaste.
- Haz lo que estás haciendo lo mejor posible.
- No te encadenes a nada que a la larga te destruya.
- Desarrolla tu generosidad sin testigos.
- Trata a cada persona como si fuera un pariente cercano.
- Ordena lo que has desordenado.
- Aprende a recibir; agradece cada don.
- Cesa de autodefinirte.
- No mientas ni robes; si lo haces, te mientes y robas a ti misma.
- Ayuda a tu prójimo sin hacerlo dependiente.
- No desees ser imitada.
- Haz planes de trabajo y cúmplelos.
- No ocupes demasiado espacio.
- No hagas ruidos ni gestos innecesarios.
- Si no la tienes, imita la fe.
- No te dejes impresionar por personalidades fuertes.
- No te apropies de nada ni de nadie.
- Reparte equitativamente.
- No seduzcas.
- Come y duerme lo estrictamente necesario.
- No hables de tus problemas personales.
- No emitas juicios ni críticas cuando desconozcas la mayor parte de los hechos.
- No establezcas amistades inútiles.
- No sigas modas.
- No te vendas.
- Respeta los contratos que has firmado.
- Sé puntual.
- No envidies las propiedades o bienes de otros.
- Habla solo cuando sea necesario.
- No pienses en los beneficios que traerá tu trabajo.
- No amenaces.
- Cumple tus promesas.
- No te quejes.
- No te quejes de tu destino.
- No elimines, sino transforma.
- Vence tus miedos, cada uno de ellos es un deseo que se camufla.
- Ayuda al otro a ayudarse a sí mismo.
- No te identifiques con tus pensamientos ni con tus emociones.
- No te tomes nada personalmente.
- No te preocupes por el futuro.
- No te arrepientas del pasado.
- No te compares con los demás.
- No te identifiques con tus logros ni con tus fracasos.
- No te identifiques con tu cuerpo.
- No te identifiques con tu nombre.
- No te identifiques con tu historia personal.
- No te identifiques con tus creencias.
- No te identifiques con tus opiniones.
- No te identifiques con tus emociones.
- No te identifiques con tus deseos.
- No te identifiques con tus miedos.
- No te identifiques con tus pensamientos.
- No te identifiques con tu ego.
- No te identifiques con tu personalidad.
- No te identifiques con tu carácter.
- No te identifiques con tu alma.
- No te identifiques con tu espíritu.
- No te identifiques con tu conciencia.
- No te identifiques con tu ser.
- No te identifiques con tu existencia.
- No te identifiques con tu vida.
- No te identifiques con tu muerte.
- No te identifiques con tu destino.
- No te identifiques con tu suerte.
- No te identifiques con tu azar.
- No te identifiques con tu voluntad.
- No te identifiques con tu deseo.
- No te identifiques con tu necesidad.
- No te identifiques con tu carencia.
- No te identifiques con tu plenitud.
- No te identifiques con tu vacío.
- No te identifiques con tu abundancia.
- No te identifiques con tu escasez.
- No te identifiques con tu riqueza.
- No te identifiques con tu pobreza.
- No te identifiques con tu éxito.
- No te identifiques con tu fracaso.
- No te identifiques con tu salud.
- No te identifiques con tu enfermedad.
- No te identifiques con tu juventud.
- No te identifiques con tu vejez.
El último consejo: Escucha consejos, pero no los apliques ciegamente sin reflexionar antes sobre los pros y los contras de hacerlo en tu contexto personal.